Ciudad de México, 11 de diciembre de 2018. Con el voto en contra del PAN, PRI, PRD y MC, el Senado de la República aprobó hoy cambios a la Ley Federal de las Entidades Paraestatales, que obligaba como requisito para dirigirlas, ser mexicano por nacimiento, estar en pleno goce y ejercicio de sus derechos civiles y políticos.
Tras un largo debate, la ley fue avalada con 66 votos a favor, 44 en contra y dos abstenciones.
Senadores de oposición señalaron que estos cambios son “un traje a la medida” para que Paco Ignacio Taibo II ocupe la dirección general del Fondo de Cultura Económica.
En contrapartida, al presentar el dictamen, la senadora Bertha Alicia Caraveo Camarena aseguró que la modificación elimina la discriminación de género y el lenguaje machista al incluir lenguaje que refiere a las mujeres.
En el debate, fue muy sobresaliente la intervención del Senador Rubén Rocha Moya, de Morena, quien al remitirse al artículo 30 de la Constitución federal, que establece que la nacionalidad mexicana se adquiere por nacimiento o por naturalización, señaló que donde la ley no distingue, los legisladores no deben distinguir, de manera que la Carta Magna “en ningún momento dice que es menos nacional el naturalizado que el “nacismo”; no distingue”.
Asimismo, argumentó, que si la ley secundaria sí distinguió, “yo me atengo a la Constitución, por lo tanto, no es un problema aquí, de hacer una ley a la medida, aquí el problema central es corregir lo errático, más aún si nos referimos a una institución cultural, más aún en estos tiempos”, apuntó.
El Senador Rocha Moya expuso que “No puede ser que, en efecto, el Fondo de Cultura Económica, para dirigirlo requiera que sea un mexicano por nacimiento, no existe ninguna razón, es un anacronismo, es discriminatorio, es xenofóbico, ya lo dijeron todos aquí, hay que corregirlo […] y de paso vamos a atender al 30 constitucional que dice qué es nacional o tiene la nacionalidad el que nace y el que se naturaliza”, puntualizó.
“Yo celebro, dijo, que sea el pretexto Paco Ignacio, porque las personas no hay que juzgarlas por lo que dicen, sino por lo que hacen.
“Por lo que él dijo en la FIL, pues ya se disculpó y vale la pena, que a una personalidad como Paco Taibo lo disculpemos, porque además alguien que escribe novela policiaca, que ha recibido por lo menos tres veces el premio Hammett, el Premio Internacional sobre Novela Policiaca, es alguien que modula su lenguaje, el literato, no cuida formas, simple y llanamente hace del lenguaje lo que le permite construir belleza literaria. Ese es el tema de Ignacio Taibo II, esa es la razón fundamental, no está ofendiendo”.
En el mismo sentido, al contestar una pregunta del Senador José Erandi Bermúdez Méndez, el Senador Rocha Moya explicó lo siguiente:
“El tema […] fundamental, Senador, es determinar en qué momento nos damos cuenta de que hay que acudir, si somos legisladores, en qué momento nos damos cuenta que hay que acudir para corregir la ley.
“Mire, yo le voy a dar un ejemplo.
“En 1992 asesinaron a Norma Corona, en Sinaloa, luchadora de los derechos humanos.
“A propósito de ello, el Presidente de la República en aquel entonces decidió formar la Comisión Nacional de Derechos Humanos, fue un pretexto, lamentable pretexto, pero en ese momento se dieron cuenta que era necesario tener un organismo que defendiera los derechos humanos porque, en efecto, el asesinato aquel había ocurrido en contra de una defensora de los derechos humanos, este fue el caso.
“Yo le pongo el caso a propósito de la parte cultural.
“Para mí es un buen pretexto que nos demos cuenta que esa ley debe corregirse porque es discriminatoria, xenofóbica, pero no sólo serviría para que nombren a un director en el Fondo, sino serviría para que se nombren a los funcionarios que ahora se les impide puedan ser funcionarios por esta condición de nacionalidad, por naturalización”. (Fin de la cita).
Después de dar puntual respuesta a todas las preguntas que le formularon, el senador Rubén Rocha Moya cerró su intervención en la siguiente forma:
“A las personas no hay que juzgarlas por lo que dicen, sino por lo que hacen. Y yo diría que a Taibo habría que premiarlo, como a muchos otros intelectuales, por sus hechos, por sus 70 obras publicadas en las más diversas líneas del conocimiento y de la literatura, etcétera, yo creo que es merecedor de un lugar, en un espacio cultural en donde por cierto un antecedente fundamental es que es fundador de Para leer en libertad, que eso nace y que tiene justamente una identidad plena con el tema de la editorial.
Entonces, yo creo que vale la pena que se fije el Presidente en él por lo que ha hecho; no por lo que dice. Y por lo que dice, para mí, en particular por lo que está cuestionado aquí, ya se disculpó y creo que es suficiente en Twitter, en los medios o en las redes”.