Hermosillo, Sonora, domingo 31 de diciembre de 2023
El 22 de noviembre 2018, el maestro Alfonso Cepeda Salas asumió el liderazgo de la organización, como secretario general del SNTE y, desde entonces a la fecha, con base en la determinación de volver al origen con visión de futuro, y retomar las dos causas fundacionales del sindicato, como son: defensa de la escuela pública y defensa de los derechos de sus agremiados, se han promovido avances de enorme significación, como es, entre otros, el programa permanente destinado a lograr que a los trabajadores de la educación se les otorga su plaza base, tal como lo establece la propia normatividad legal.
Cabe recordar que, en febrero de este año, el líder nacional del SNTE hizo un recuento del Programa Permanente de Basificación y reveló que, desde el inicio de su gobierno, el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, atendió esta demanda planteada por el Sindicato y aceptó que fuera para todos los trabajadores de la educación que cumplieran seis meses un día de laborar. Agregó que “el Sindicato reconoce al presidente su voluntad política y determinación de hacer permanente la revalorización del magisterio porque, para un trabajador, la certeza en el empleo es la garantía de su patrimonio y el de su familia”.
Los datos son muy alentadores. En su mensaje de fin de año 2023, el maestro Alfonso Cepeda Salas afirmó que en cinco años han logrado 950 mil basificaciones que representan certeza y estabilidad laboral para ese número de familias.
Tales resultados han sido posibles, gracias a las gestiones del SNTE con la SEP y las autoridades estatales y con la comprensión de un presidente que impulsa la transformación de la vida nacional, y que tiene una clara política social en favor de la educación pública y de apoyo a un Sindicato que lucha por mejorar las condiciones laborales, sociales y profesionales de los trabajadores de la educación y de los compañeros jubilados y pensionados que forman parte de nuestra organización gremial.
Por ello, ha de reconocerse la enorme importancia de ese logro que presenta el líder del magisterio nacional, habida cuenta de que la certeza laboral, la inamovilidad en el empleo, la basificación, ha sido un anhelo largamente perseguido por el magisterio nacional a través de su historia.
En efecto, hubo un tiempo en que los funcionarios públicos podían cesar a sus trabajadores, sin mayores limitaciones legales, y fue la lucha sindical del gremio magisterial la que impulsó en gran medida la “Ley de Inamovilidad del Profesorado dependiente de la Secretaría de Educación Pública”, expedida el 16 de enero de 1930 y promulgada por el presidente Emilio Portes Gil. Asimismo, el Estatuto Jurídico de 1938 y las Condiciones Generales de Trabajo de la SEP, de 1946.
En este proceso, importa destacar la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, Reglamentaria del Apartado “B” del Artículo 123 constitucional, que promulgó el presidente Adolfo López Mateos y que se publicó en el Diario Oficial de la Federación, el sábado 28 de diciembre de 1963.
Está Ley establecía y establece en su artículo 6º que los trabajadores de base serán inamovibles, y que “Los de nuevo ingreso no serán inamovibles sino después de seis meses de servicios sin nota desfavorable en su expediente”.
Pero hay que decirlo como es, durante todo el llamado periodo neoliberal, de 1982 a 2018, casi no se respetó el mandato de ese artículo, pues muchos trabajadores duraban años con plazas interinas que no les generaban ninguna certeza laboral.
Por ello, mi aplauso más rotundo a la dirigencia nacional de mi Sindicato por este programa trascendental. Estoy de acuerdo con estas palabras que alguna vez le escuché al maestro Alfonso Cepeda Salas: “El mejor legado del SNTE a sus agremiados en esta etapa, es la certeza laboral”.